El Foie gras es una barbaridad insoportable

10/12/2021
Pere Fiol Dietista y cofundador

Esta afirmación llena de empatía la publicó hace unos meses en su cuenta de Twitter el ministro inglés de Bienestar Animal, Lord Goldsmith (...)
Este artículo lo publicamos originalmente en el semanario HoraNova

 

                      Este artículo lo publicamos originalmente en el semanario HoraNova 

 

Esta afirmación llena de empatía la publicó hace unos meses en su cuenta de Twitter el ministro inglés de Bienestar Animal, Lord Goldsmith. Definitivamente, hay países que nos llevan ventaja.

Recordáis que la Tate Modern de Londres fue noticia hace tres años ya que decidió retirar el foie gras del menú navideño de su restaurante? Fue resultado de la investigación llevada a cabo por Igualdad Animal en granjas francesas.

En el vídeo se veía la manera en qué (mal) viven y son alimentadas a la fuerza las aves con las cuales se elabora este producto.

El foie gras no es más que el hígado enfermo de patos y gansos. Se obtiene sobrealimentando a estos animales, que se encuentran inmovilizados en jaulas donde no pueden ni extender sus alas, introduciéndoles un tubo que puede ser de hasta  30 cm por la garganta que les llega al estómago y por donde se les bombea de manera forzada la comida. Acción que se va repitiendo varias veces al día.

Lo que se pretende con la alimentación forzada es que el ave acumule grandes cantidades de grasa en el hígado hasta contraer una enfermedad llamada esteatosis hepática que provoca que este órgano llegue a una medida de hasta diez veces el que tendría el de un ejemplar sano.

Por si fuera poco, todo el proceso les produce heridas en el esófago y órganos internos, infecciones, problemas respiratorios, además de generarles un gran estrés y sufrimiento.

Cuando llegan al peso deseado son sacrificados en la misma explotación ya que en su estado no soportarían el transporte.

Debido a la crueldad que supone esta práctica, la elaboración de foie gras ya estaba prohibida en el Reino Unido y en 17 países más como Argentina, Austria, Chequia Dinamarca, Israel, Finlandia, Israel, Turquía, Alemania, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Suecia, Noruega, Polonia, Suiza y Holanda pero en cambio se permite la importación. ¿No os parece una incoherencia?

De hecho, Reino Unido importa 200 toneladas anuales. Pero por fin la buena noticia es que el Gobierno Británico parece decidido, después de años de campañas reclamándolo, a ponerle fin aprovechando el nuevo contexto generado por el Brexit, que permite un mayor control de las importaciones y acabando por lo tanto definitivamente con el consumo de foie gras en aquel país.

En cuanto a Italia, destacar que la mayoría de supermercados han decidido dejar de comercializar este producto.

A nivel europeo,  los paises donde existen granjas y se permite la explotación de estos animales son Francia, Bulgaria, Hungría, Bélgica y España. 

Y como anécdota, de momento eso sí, solo el Estado de California, desde el 2012, y Nueva York, desde el 2019, han prohibido su venta en restaurantes y tiendas pero esperamos que el ejemplo se extienda por todas partes.

Pere Fiol

Foto AnimaNaturalis