#ElFindelasJaulas

                                      Artículo publicado originalmente en el semanario HORANOVA julio 2021

La cría en jaula parece que tiene los días contados.

La Comisión Europea ha asumido recientemente el compromiso de trabajar en una propuesta legislativa para finales del 2023 que contemple la prohibición de forma gradual de las jaulas hasta el 2027.

La medida afectará a gallinas, novillos, cerdas gestantes, conejos y otros animales. También se han comprometido a introducir normativas equivalentes a las de la UE para los “productos” importados de fuera.

La propuesta responde a la Iniciativa Ciudadana Europea, End The Cage Age ( la Era del Fin de las Jaulas) que ha recogido 1,4 millones de firmas de ciudadanos de   todos los Estados miembros y es la primera iniciativa con éxito para los animales de granja.

Desde Projecto Lola pensamos que es una noticia excelente, puesto que minimiza el maltrato animal. No olvidemos que una cerda vive encajonada la mitad de su vida en un espacio minúsculo donde tan siquiera puede girarse o que una gallina ponedora de jaula, las del número 3, tiene que vivir en el equivalente de poco más de un folio, sin espacio ni para extender sus alas. Horrible.

Aun así, recordamos que esta iniciativa sólo pretende minimizar el maltrato animal y creemos que hay que ir más allá.

El consumo de carne es una de las formas más destructivas con mayor impacto negativo para nuestro planeta. Es una de las principales fuentes de emisión de metano, y una de las responsables de la tala de selvas en el Amazonas para plantar soja, destinada a la alimentación animal. 

El 80% de la producción mundial de esta legumbre es para alimentar los animales de las macrogranjas. Además, según la FAO, se necesitan 15.000 litros de agua para generar un solo kilo de carne.Sin palabras.

Por suerte, hay diferentes iniciativas que pueden ayudar a revertir esta situación. 

La carne ética o carne limpia es una de ellas. Consiste en extraer una muestra de células de un animal a través de una biopsia, aislar las células musculares y voilà,se cultiva la carne de laboratorio. Con las células extraídas de un solo cerdo, se evitará el sacrificio de 400 ejemplares. 

Se calcula que en 2040 la mayor parte de la proteína animal que consumimos provendrá de esta fuente que a día de hoy nos parece de ciencia ficción. Actualmente ya se encuentra a Israel y Singapur y se prevé que en pocos años estará en las tiendas de nuestro país.

En cualquier caso la base de una dieta saludable tienen que ser productos de origen vegetal como verduras, frutas, frutos secos, aceites  saludables o legumbres. Por lo tanto, la reducción del consumo de carne es también es una cuestión de salud para todo el mundo.

Tiempo al tiempo.

Pere Fiol-Dietista y Cofundador de ProjecteLOLA.

Fotogtrafía: ElPeriódico