NO sin mi amigo
Muchas de las personas sin hogar viven con la única compañía que les ofrecen sus animales, los únicos que los miran con afecto y aceptación. ¿Te separarías de ellos si la Administración te ofrece un albergue a cambio de abandonar a tu animal?
Artículo publicado originalmente en la Revista GIDONA marzo 2021 Fotografía FAADA/MillorsAmics
Una sola persona viviendo en la calle es el absoluto fracaso del sistema.
En los días de frío invierno que hemos vivido han muerto por hipotermia personas que vivían en la calle. ¿ No os escandaliza este hecho? A mí, muchísimo. Sobre todo pensando en la cantidad de equipamientos vacíos y cerrados a cal y canto existentes, mientras en sus puertas hay personas que necesitan una mano.
Siempre me sorprende la poca voz que desde los medios de comunicación se da al sinhogarismo más allá de repetir las cuatro banalidades de siempre. ¿ No tenéis inquietud por saber cómo es la vida en la calle? Sin un lugar donde descansar, recuperarte, asearte, un espacio donde sentirse seguro del resto del mundo.
¿ Nadie ha pensado en la soledad de la calle, donde miles de personas pasan por tu lado sin mirarte, como si fueras un desecho? Y además si eres mujer tienes un plus de dificultad añadido.
¿ Y el impacto para la salud mental de vivir esto día tras día ? .La soledad, la exclusión social la enfermedad y el rechazo no son experiencias que nadie quiere vivir. Al fin y al cabo lo que todos buscamos desesperadamente es el amor y la inclusión social.
Solemos pensar que trabajando y luchando como lo estamos haciendo no llegaremos nunca a esta situación, de encontrarte sin recursos, rechazado por prácticamente todo el mundo y sin nadie a tu lado. Ellos también lo pensaban no hace tanto.
Muchos de los sinhogar viven con la única compañía fiel de sus animales, los únicos que los miran con afecto y les dan amor y aceptación. Y es que no puede haber un compañero más maravilloso que éste que, pase lo que pase, siempre estará a tu lado. Sobre todo cuando el resto de personas te han cerrado la puerta.
¿Te separarías de él si la Administración te ofreciera ir a un albergue a cambio de librarte de tu animal? Es evidente que no. Pero esto es lo que ofrece la Administración pública y la mayoría de las entidades que trabajan para estos colectivos.
Detrás de las muertes de estas personas que a veces han rechazado ir a un albergue tenemos que ver su realidad compleja y no quedarnos en la superficie.
La gente que vive en la calle y tiene animales como única familia NO se quieren separarse de ellos y muchos prefieren la fría y peligrosa calle antes que traicionar a su animal. Y es que parece mentira que en 2021 yo esté explicando esto.
Por suerte, cada día somos más los que lo vemos así y entidades como la Fundación FAADA mediante su programa MEJORES AMIGOS trabaja visibilizando esta realidad y dando apoyo a las entidades dedicadas al sinhogarismo para crear espacios donde las personas puedan acceder con sus animales, como por ejemplo ya hacen la Fundación Arrels , Centre Assís o Sant Pere Claver.
Y no son los únicos discriminados. ¿Sabías que el 59% de las mujeres maltratadas retrasan la salida del hogar donde está su maltratador porque no pueden llevarse su animal a los pisos de acogida?
Sé que muchos de los que leen esta sección comparten su vida con algún animal.¿ Se imaginan lo que sería encontrarnos en esta situación? Con sólo pensarlo me duele el corazón.
Espero que sea esta la última vez que tenga que hablar de un tema que tiene solución.
Más información en www.millorsamics.org